hora de cambiarEl pasado día 22 de noviembre tuve el privilegio de asistir al Andalucía Management 2018, en el Palacio de Ferias y Congresos de Málaga, donde pude asistir junto con 400 altos directivos del Sur de España a una serie de ponencias bajo el slogan “CRECER EN LA ERA EXPONENCIAL” llevadas a cabo por ponentes de primer nivel nacional e internacional. De las diversas presentaciones, pude sacar dos conclusiones fundamentales.

En primer lugar, España y los españoles somos un activo valiosísimo, ya que somos, junto con Corea del Sur, los países con un mayor crecimiento en PIB de los últimos 50 años.

 

Producto interior bruto españa  producto interior bruto corea del sur

En segundo lugar, y aquí es donde tenemos una gran diferencia a nuestra contra con muchos otros países, es fundamental que los Gobiernos de los países y sus instituciones apoyen de manera decidida a las empresas para que éstas inviertan en innovación y, de esta manera, se produzcan crecimientos en sectores estratégicos que permitan un beneficio sostenible para la sociedad.

Esta es la razón por la que determinados países o áreas como Silicon Valley o el ya nombrado Corea del Sur concentran gran cantidad de industria y empresas a la vanguardia de la innovación y la creación del futuro que vendrá.

es fundamental que los Gobiernos de los países y sus instituciones apoyen de manera decidida a las empresas para que éstas inviertan en innovación”

En este segundo punto es donde quiero hacer todo el énfasis necesario, porque es verdaderamente triste que en las circunstancias actuales, donde todo el entorno está cambiando a una velocidad nunca antes vista, y que la anticipación es un factor clave en el posicionamiento industrial estratégico, sigamos anclados en el pasado y haciendo propuestas populistas que no llevan sino a  enardecer aun más determinados ánimos, en lugar de pensar en qué futuro queremos tener para tomar las decisiones adecuadas en el presente.

“todo el entorno está cambiando a una velocidad nunca antes vista, y que la anticipación es un factor clave en el posicionamiento industrial estratégico”

España tiene que dejar atrás los complejos y mirar hacia adelante, porque será la única manera de que nuestro país, calificado como uno de los mejores para vivir, también sea uno de los mejores para “ganarse la vida” en actividades profesionales que vayan más allá del sector servicios. Solo hay que navegar un poco por internet para encontrar multitud de compatriotas que están en puestos de responsabilidad a nivel mundial, en las empresas y sectores de referencia, pero lamentablemente pocos se quedan dentro de nuestro territorio.

Todos tenemos que asumir nuestra responsabilidad, no solo en la elección de quienes nos gobiernan, sino en la exigencia de lo que queremos y en cómo queremos que se gestione.

Es hora de cambiar

Por lo cual, los primeros que tenemos que cambiar nuestra manera de pensar somos los propios españoles, transmitir nuestras preocupaciones y exigir claramente dónde queremos estar posicionados como país y como sociedad, cerrar de una vez las heridas del pasado histórico, porque lamentablemente el pasado es inamovible, considerar que estamos donde estamos gracias a ese pasado, que si lo ponemos todo en una balanza pesa muchísimo más lo conseguido que lo perdido, que el todo es mayor que la suma de las partes y que tenemos muchísimo potencial.

Solo en el momento en que cada uno de nosotros en primera persona seamos capaces de modificar nuestro pensamiento y dirigir nuestras energías hacia adelante será el momento de, con la honestidad moral necesaria, exigir a nuestros líderes que dirijan las tomas de decisiones hacia el objetivo del bien común para todo el país, de lo que realmente la población necesita para enfrentar el futuro con felicidad y optimismo y que nos posicionen donde merecemos estar.

Y si no son competentes para hacerlo, que dejen paso a aquellos dispuestos comprometerse con las generaciones futuras, que serán quienes juzguen, y sobre todo sufran, las consecuencias de la buena o mala gestión.

Arturo Gálvez – Consejero de empresas
http://ajgalvez.com/

“Elige un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar ni un día de tu vida”. Esta frase del filósofo chino Confucio es clave en la búsqueda de la felicidad.

Necesaria e inevitablemente en la vida tenemos que trabajar, y nada mejor que ser capaces de elegir ese trabajo que nos gusta, que nos apasiona y en el que nos sentimos reconocidos y realizados para que el hecho rutinario de ir a nuestro puesto de trabajo se transforme en disfrutar trabajando, y reemplace la sensación de obligación de desempeñar por la de disfrutar de nuestra dedicación.

Sin embargo, la citada locución encierra en su primera palabra algo perverso; “elige”.

la felicidad en la empresa

Desgraciadamente, y en lo que al trabajo se refiere, la capacidad de elección no es algo universal y disponible para todas las personas, y ahí es donde los líderes de los equipos debemos tomar las decisiones oportunas para poder revertir esta situación.

Muchísimos trabajadores, por multitud de circunstancias que no deben ser juzgadas, están destinados a trabajar donde puedan en lugar de donde quieran. Esto no implica que hayan de sentirse resignados a su mala suerte.

Los responsables de la gestión en las empresas, independientemente del tamaño que éstas tengan, tenemos que hacer nuestro trabajo asumiendo la responsabilidad de crear un ambiente propicio para que nuestros colaboradores se sientan felices y afortunados de trabajar junto a nosotros y remar en la dirección en la que todos obtendremos los mejores resultados, ya que está demostrado que a través de la felicidad se llega a los resultados de manera muchísimo más eficiente y eficaz.

Factores clave para alcanzar la felicidad

Es clave conocer a fondo a nuestro equipo, ya que cada persona necesitará diferentes estímulos para activar esa chispa que les haga sentirse seguros, reconocidos y afortunados. Y no hay una metodología que establezca un procedimiento estandarizado, lo cual obliga a un profundo trabajo de conocimiento de cada uno de nuestros colaboradores. Pero una vez hecho, la velocidad en que seremos capaces de alcanzar nuestros objetivos compensará toda la labor previa.

Por el contrario, no hacerlo desencadenará que, en lugar de tener un equipo que nos impulsa en la dirección adecuada, tendremos un grupo de personas desmotivadas, sin rumbo fijo y que, si son buenos buscarán irse a otra compañía donde se sientan mejor, pero si no lo son, se quedarán con nosotros a desgana con el efecto pernicioso que ello tendrá para el resto.

Acciones generales para conseguir la felicidad

Acciones generales por todos conocidas, como el reconocimiento en público, la corrección en privado, y hacer partícipe al equipo de los objetivos de la empresa, sumadas a una labor a medida en las que seamos capaces de estimular cada persona individualmente nos hará diferenciarnos, tener un equipo leal que por sí mismo seleccionará a los mejores componentes, y nos dará una fortaleza y posición imbatibles, lo cual es fundamental en los tiempos actuales.

la felicisdad clave lograr metas

Arturo Gálvez – Consejero de empresas
http://ajgalvez.com/

“Si tu no trabajas por tus sueños, alguien te contratará para que luches por los suyos” (Steve Jobs)

Las actuales circunstancias, tras la profunda crisis económica que aún estamos atravesando en España, ha tenido dos consecuencias fundamentales; en primer lugar, nos ha hecho poner los pies en el suelo y tomar conciencia de la realidad en la que vivimos, que nada es para siempre, y que, igual que se puede subir, se puede bajar. Por otra parte, una vez que lo peor ha pasado y de alguna manera volvemos a gozar de cierta estabilidad, o al menos tranquilidad, asumir riesgos nos da cierto pánico, y nos asusta salir de la mal llamada “zona de confort”.como salir zona de confort

Todos deseamos mejorar nuestras circunstancias, sean las que sean, pero tras la tempestad somos reacios a asumir que un cambio a mejor puede conllevar un resultado que no esperamos.

Puede deberse a dos perfiles muy distintos: el primero es un perfil conformista, sin ambición, y que se resigna a mantener un estatus de “seguridad” sin más aspiración en la vida, y entrecomillo la palabra seguridad, porque considero que ha quedado claro en estos años que han pasado que absolutamente NADA es seguro, y que las torres más grandes y sólidas pueden caer en un abrir y cerrar de ojos, arrastrando en su caída todo lo que tengan alrededor.

El segundo perfil es aquel que, si bien tiene una clara intención emprendedora y de mejora, tras malas experiencias es reticente a volver a asumir riesgos por el vértigo que se experimenta ante la posibilidad de malos resultados.

Tomar decisiones y salir de la zona de confort

Si tu perfil es el primero, sinceramente no tengo nada que decir; allá tú con tu actitud, y si realmente vas a encontrar satisfactorio mantenerte en esa falsa seguridad anteriormente comentada, adelante. Sin embargo, si te ves reflejado en el segundo perfil, es el momento de arremangarse y, tomando las precauciones necesarias, empezar a caminar por conseguir tus sueños.

salir de la zona de confort

La conocida como zona de confort, podemos calificarla como zona de “pérdida de oportunidades”. El miedo nos hace quedar inmóviles y acomodarnos a la “seguridad” del presente, pero nos aleja de un futuro mejor y eso es algo que tenemos que valorar. Evidentemente, el riesgo = 0 no existe, pero podemos aprovecharnos de la experiencia propia y ajena para minimizar la probabilidad de cometer errores insalvables.

No hay nadie en la historia de la humanidad que haya conseguido cosas importantes sin asumir riesgos, y es a ese perfil de personas a quienes debemos todo lo que disfrutamos hoy. Podemos poner nuestra pequeña aportación para mejorar nuestro presente y el futuro de los que vengan tras nosotros.

Es hora de salir de nuestra zona de confort

Es el momento de salir de nuestra zona de confort y tener en cuenta la frase de Steve Jobs con la que iniciaba este artículo, o alguien nos utilizará para salir de la suya.

Arturo Gálvez – Consejero de empresas
http://ajgalvez.com/

De un tiempo a esta parte se ha incorporado a nuestra gestión un parámetro al que no se le había prestado demasiada atención, que se ha convenido en denominar la Responsabilidad Social Corporativa o Empresarial (RSE), como elemento vital en la definición de la misión, visión y valores y objetivos de las compañías, y como parte indispensable del desarrollo de las operaciones de la empresa.

responsabilidad social corporativa

Debido al vertiginoso avance que la economía y la industrialización han experimentado desde la II Revolución Industrial, y, especialmente durante el periodo de la Guerra Fría y posterior (desde finales del s.XX hasta la actualidad) todo el esfuerzo se ha puesto en la productividad, la eficiencia de los procesos y en una competitividad para alcanzar el resultado sin prestar atención a los efectos colaterales que ello tenía.

Las diferentes legislaciones, lógicamente siempre iban un paso por detrás ya que es imposible proponer una corrección ante un hecho que no se ha producido, y, más aun, no se tenía experiencia suficiente para poder anticiparlo, con lo cual, se regulaba el presente, con un mal del pasado ya hecho, y con la incertidumbre de los impredecibles daños futuros.

¿Qué es la Responsabilidad Social Corporativa?

Según el Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa, ésta se define como “una forma de dirigir las empresas basada en la gestión de los impactos que su actividad genera sobre sus clientes, empleados, accionistas, comunidades locales, medioambiente y la sociedad en general”.

Esta definición, si bien es breve y concisa, explica con gran claridad que la RSE es algo que va más allá de conceptos medioambientales o eco-friendly, para ser una parte fundamental en el ADN de las empresas. Se trata de algo que tiene que empapar la identidad y la personalidad de las organizaciones, que todo el staff debe conocer, asumir y aplicar, y que la entidad debe comunicar para que sea un elemento más de valoración por el que nuestros clientes, proveedores, y todo el que quiera nos podrá evaluar y calificar.

La Responsabilidad Social empresarial es cosa de todos

Esta cuestión de la RSE no es exclusiva de las grandes corporaciones o las cotizadas en el mercado de valores; es algo que tiene que estar incorporado sea cual sea el tamaño de nuestra empresa o negocio, porque, de lo contrario, perderemos adaptabilidad y posición competitiva y nuestros resultados reflejarán esa desventaja.

El día a día nos ha llevado a asumir las comunicaciones, internet, nuevas tecnologías, etc. como algo propio que define si estamos dentro o fuera del mercado y el entorno actual, y la Responsabilidad Social Corporativa no va a ser menos.

Hoy en día todavía me encuentro con directivos que le dan una importancia menor a este asunto, sin ser conscientes de las consecuencias que ello acarreará, y hay algo peor, y es que, dado que es una cuestión “silente” ya que no destapa ningún parámetro o ratio negativo en los estados financieros, cuando los síntomas aparezcan, puede ser demasiado tarde para poner las soluciones necesarias.

Transparencia y comunicación en la responsabilidad social empresarial

Afortunadamente cada vez son más las empresas que publican su memoria de RSE o alguna denominación similar en la que muestran y demuestran las acciones que llevan a cabo, los resultados obtenidos y los compromisos que asumen a corto, medio y largo plazo, con lo cual facilitan una herramienta tangible por la que valorarlas y saber qué podemos esperar de ellas.

Es responsabilidad de todos aportar a la sociedad acciones de mejora y compromiso, y estar dispuestos a ser auditados por ello, lo que redundará en una mayor sostenibilidad de nuestras organizaciones y en un legado mejorado para las futuras generaciones.

Arturo Gálvez – Consejero de empresas
http://ajgalvez.com/

La externalización de determinados puestos o departamentos de nuestras organizaciones es un medio y una herramienta importante para aumentar la flexibilidad y la adaptación de nuestra estructura organizativa ante determinados cambios o al objeto de experimentar la efectividad que una decisión pueda tener, testando realmente y de manera objetiva el resultado obtenido.

Sin embargo, abusar de este sistema puede hacernos caer, no solo en causar un efecto negativo entre nuestros empleados y colaboradores, sino en correr el riesgo de perder la personalidad de nuestra empresa. Y lo verdaderamente peligroso es que si la contratación de servicios externos funciona como debe, la tentación a abusar de este tipo de servicios por encima de lo aconsejable puede ser importante.

externalización en organizaciones

En el mundo empresarial actual nos movemos en un entorno regido por la obtención del mejor resultado posible en el menor plazo de tiempo, y los gestores encargados de tomar decisiones somos capaces de hacer verdaderos malabarismos al objeto de satisfacer el mandato que se nos ha dado, entre otras cosas, porque parte de nuestros emolumentos suelen estar vinculados a la consecución dichos objetivos. Sin embargo, ello nos puede llevar a no prestar la atención adecuada a temas de vital importancia, como el clima laboral, cómo nos perciben nuestros stakeholders, la responsabilidad social corporativa (que por sí misma merece un artículo aparte), etc, lo que, si bien a corto plazo puede ser satisfactorio, afectará inevitablemente a la sostenibilidad de la empresa en el tiempo.

La Sostenibilidad Empresarial y la externalización

Sostenibilidad Empresarial puede definirse en pocas palabras como la búsqueda de un equilibrio que permita obtener los resultados deseados en el presente, y que dicha obtención pueda mantenerse en el futuro a medio y largo plazo. Por ello es importante usar las herramientas que tenemos a nuestro alcance para lo que están diseñadas, y no tomar creativas decisiones de innovación en su uso, ya que el resultado, al final, será diferente al deseado.

De la misma manera que cada tuerca precisa de una llave adecuada para optimizar las prestaciones para las que ha sido diseñada, con la externalización de nuestra estructura empresarial pasa exactamente lo mismo.

¿Pensamos que podemos implementar un nuevo proceso, actividad de gestión, etc, y necesitamos testar el resultado real que puede aportar? ¡Adelante! Es el momento de contratar personal de gestión externo y valorar de manera objetiva lo que vamos a conseguir con ello, pero una vez que tenemos el feedback necesario y consideramos que vamos a incorporar ese proceso a nuestra actividad de manera permanente, debemos diseñar la estructura óptima con el mismo carácter de permanencia, y tal vez dejar un porcentaje determinado de externalización con el fin de tener ese punto de flexibilidad necesario, pero no más.

Eficiencia y eficacia en la toma de decisiones

La eficiencia y la eficacia debe obtenerse dentro de la honestidad en la toma de decisiones. Si la búsqueda del óptimo resultado cortoplacista nos lleva al ejercicio de ciertas ingenierías en la gestión que deriven en el uso de figuras como el falso autónomo, podemos estar seguros de que dicho resultado no se mantendrá a largo plazo.

Si bien es cierto que la situación legislativa y fiscal en muchas ocasiones no es una ayuda en la búsqueda de la mejor ratio de rentabilidad, es nuestra responsabilidad como gestores poner nuestro grano de arena para intentar cambiar la actualidad y transformar nuestro entorno profesional de cara al futuro que queremos construir. No debemos olvidar que nuestros resultados dependen de las personas que colaboran en su consecución, por lo cual deben ser apreciados, reconocidos y cuidados, y, lo que es más importante aún, que ellos así lo sientan.

Arturo Gálvez.
http://ajgalvez.com/

«Las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes, sino aquellas que se adaptan mejor al cambio«. Tras esta frase expresada por el naturalista inglés Charles Darwin en el año 1859 en su obra «El origen de las especies» hay una realidad perfectamente aplicable a la situación empresarial actual.

adaptabilidad de empresas

La evolución del entorno profesional

Nos encontramos inmersos en la IV Revolución Industrial, y la globalización y los constantes avances en las tecnologías de la información y la comunicación, a los que hay que sumar la convergencia entre tecnologías digitales, físicas y biológicas, están provocando que el entorno profesional en el que nos movemos no se parezca en nada al que había hace tan solo 5 o 10 años, y más vertiginoso aún es que tampoco se va a parecer en nada a lo que nos encontraremos tan solo dentro de un lustro.

Adaptarse a los nuevos desafíos

Las organizaciones empresariales tienen ante sí un desafío apasionante; adaptarse a la mayor velocidad posible a los cambios que se producen, ya que es la única manera de diferenciarse y mantenerse en este nuevo terreno de juego donde lo que es válido hoy, mañana puede no serlo, y la velocidad de adaptación será la clave en la ecuación que permitirá a las empresas continuar obteniendo beneficios y mantenerse vivas a medio y largo plazo.

Adaptabilidad al cambio

La realidad ha cambiado, y podemos elegir aceptarlo y adaptarnos, o vivir de espaldas a ello y asumir que, más pronto que tarde, estaremos fuera de juego. Es el momento de hacer una reflexión profunda respecto de nuestras estructuras, considerar si estamos optimizando correctamente nuestros recursos y si tenemos un esquema de costes que nos permita la adaptabilidad que se requiere, y hemos de hacerlo deprisa al objeto de no perder distancia con nuestros competidores. Solo con una clara determinación y tomando las decisiones oportunas que nos permitan ser flexibles, bajo mi humilde y personal punto de vista, podremos afrontar el futuro con seguridad y confianza.

Arturo Gálvez.
http://ajgalvez.com/

 

Quiero compartir una estafa de oferta de trabajo que recibí hace dos semanas para prevenir a otros sobre esta práctica, que, como ya he comprobado, se ha realizado para otras personas. No voy a escribir el nombre de quienes contactaron conmigo porque lo han hecho bajo el nombre de personas reales que trabajan en la compañía real y en la que trataron de convencerme de que estaban trabajando.

Hace dos semanas, recibí una solicitud de contacto, y después de aceptarla, ella (era una mujer, vicepresidenta de una importante compañía de petróleo establecida en Kuwait) me dijo que mi perfil se ajustaba perfectamente a la persona que estaban buscando (alguien responsable y competente en logística y cadena de suministro). En primer lugar, estaba un poco escéptico porque no es muy habitual que una persona en este nivel de staff en una empresa importante intente ponerse en contacto con un nuevo empleado, pero ¿quién sabe?

Ellas, debido a que había dos mujeres, la vicepresidenta y la gerente de comunicación corporativa, comenzaron a darme información diferente sobre el trabajo, las ganancias, las responsabilidades, etc., pero muy lentamente, pidiendo mi CV y ​​mis datos personales, y enviándome documentos de la compañía real (cortada y pegada) con el logotipo real, texto en árabe y todo lo que podía disfrazar su comunicación de realidad, y yo respondía porque no había nada que me comprometiera mucho.

Después de «superar» todas las condiciones y controles del departamento de contratación, me enviaron todas las condiciones económicas, y fueron increíblemente buenas, así que comencé a pensar que era una estafa, pero decidí continuar mientras no tuviera que pagar dinero

El trabajo consistía en negociar con una empresa de productos químicos sobre el suministro de un producto llamado EulakiDrill, un aditivo para ayudarlos en sus actividades de perforación, y me dieron el nombre de una empresa que sus expertos habían aprobado como proveedor confiable, y también su página web (para hacerme evitar buscar la compañía y el producto). Puedo escribir el nombre de la empresa porque no existe; Gradon Chemical, www.gradonchemical.com

Cuando traté de encontrar el producto, fue imposible, y fue lo mismo con la compañía. Google no lo encontraba, pero la página web realmente existía (no la compañía). Después de haber hecho el contacto e informado a los falsos ejecutivos de Kuwait, me dijeron que todo estaba bien, pero necesitan una muestra de 20 litros del producto, y aquí está el truco; tenía que pagar y me reembolsarían en cuanto tuvieran el producto en sus instalaciones (con la dirección de la compañía real en Kuwait).

Obviamente, ha sido el final de mi «rentable» negocio con ellos y, afortunadamente, mi dinero está en mi bolsillo.

Quiero compartir esto solo para advertir sobre esto, para arruinar el negocio de este tipo de personas, y realmente agradecería que todos compartan para dar la mayor difusión posible.

Muchas gracias.