¿Buscas una oportunidad?

La tienes justo delante y no te has dado cuenta

En el futuro habrá escasez de empleo, pero abundará el trabajo» desconocido

Esta magnífica frase, cuyo autor desconozco, tuve la oportunidad de leerla durante un viaje por California, concretamente en la Universidad de Stanford y, si bien en el primer momento no le presté demasiada atención, quedó grabada en mi mente y cada día la tengo más y más presente.

El futuro es algo que nos llena de incertidumbre, más aún con la disrupción y la velocidad de cambio que estamos viviendo en nuestros días y que va a seguir incrementándose; lo primero que esta frase nos descubre es cual es nuestra actitud, de lo cual dependerá el quedarnos con la primera parte o con la segunda. Si nos paramos en la primera parte, estamos condenados a vagar en una especie de apocalipsis zombi profesional, sin un rumbo claro; sin embargo, si decides salir de la “zona de confort” y quedarte con la segunda parte de la frase, las oportunidades van a aparecer sin la menor duda.

Las empresas contratan empleados… y COMPRAN SOLUCIONES

Empieza a pensar en ti como un producto, conócete a ti mismo, explora en tu interior y descubre cuales son tus fortalezas. Hay algo que seguro que haces muy bien, mucho mejor que la mayoría, y ahí es donde hay que enfocarse. Tu eres capaz de ser la solución para un problema que seguro muchos profesionales y empresas tienen, y que están dispuestos a pagar por ello; por eso es importante hacer el denominado análisis DAFO pero a escala personal, con el fin de hacerte consciente de tus debilidades y amenazas (para gestionarlas) pero lo más importante, tus FORTALEZAS y las OPORTUNIDADES que te generarán.

Ponte como producto en el mercado

Una vez que tienes claro lo que tu aportas como producto, hay que prepararse para hacerse visible; es el momento de crear tu MARCA PERSONAL, y eso es algo que hay que hacer BIEN desde el principio, pues “no hay una segunda oportunidad de causar una buena primera impresión”. Por ello es fundamental ponerse en manos de un buen profesional que no solo va a ser capaz de ayudarnos a dar nuestra mejor versión, sino que además nos guiará para que seamos nosotros quienes nos demos cuenta de nuestros valores y como transmitirlos, lo que será un aprendizaje esencial que llevaremos en nuestro disco duro personal para siempre. No sugiero nombres en este artículo por motivos obvios, pero en privado a través de mi perfil en LinkedIn me tienes a tu disposición por si quieres saber quién, en mi absoluta y modesta opinión, puede serte de utilidad a este respecto.

Hoy en día, y gracias a herramientas como Linkedin, resulta muy fácil ganar visibilidad.

Hazte visible

Llega el momento de acercarte a tu cliente, para lo cual hay que estar completamente enfocado. Busca profesionales a los que seguir, que publican periódicamente consejos y recomendaciones de gran utilidad, muy eficaces y, lo mejor de todo, lo hacen de manera altruista. Comenta sus publicaciones y las de quienes también comentan, e irás creando una red amplia y sólida. Decide las empresas, sectores y ubicaciones donde crees que puedes ser una gran alternativa y contacta con directivos y personas clave. Esto es algo realmente sencillo utilizando apropiadamente la gran cantidad de filtros que LinkedIn pone a nuestra disposición. Es absolutamente Fundamental que al solicitar conexión te identifiques y expliques lo que haces, de una manera respetuosa y sincera, pues no hay nada peor que recibir conexiones por el mero hecho de conectar. Si no quieres ser uno más, no te comportes como uno más. Diferénciate desde el primer momento. Esto no va de coleccionar contactos, sino de interactuar, aportar y aprender. Lo mismo hay que hacer cuando contacten contigo.

Aprende de los rechazos y nunca abandones

Finalmente, nada es fácil por lo que, con bastante probabilidad, te vas a enfrentar a situaciones de rechazo, pero dichas situaciones son oportunidades para mejorar, para depurarte como producto y para ser una mejor propuesta profesional. Por ello, sigue adelante; el rechazo de hoy será una mejor oportunidad mañana, pero hay que mantener la actitud positiva. Por esto es fundamental hacer un buen análisis personal de manera que tengamos el absoluto convencimiento de que somos esa solución perfecta que alguien necesita y que, sin ninguna duda, aparecerá en nuestro camino.

Las soluciones mágicas no existen y desconfía de quienes te las ofrezcan (y más aun de quienes te las vendan), pero una actitud apropiada, un enfoque claro y trabajar en la línea correcta nos hará estar mucho más preparados para poder detectar las oportunidades que apareceran y que nos identifiquen como la mejor alternativa posible.

0 comentarios

Dejar un comentario

¿Quieres unirte a la conversación?
Siéntete libre de contribuir!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *